Muchas compañías han reconfigurado sus cadenas de suministro como reflejo de sus estrategias más recientes, y descubren que comprometerse con estas «buenas prácticas» les exponen a riesgos inesperados. En el mercado actual, bastante volátil, es un riesgo focalizarse en una sola estrategia. La crisis financiera global, el aumento de los costes en los países en desarrollo, los desatres naturales y la inestabilidad de los precios de las materias primas pueden ser una amenaza para la cadena de suministro-y pone en peligro la capacidad de competir de una compañía.

El profesor David Simchi-Levi dice, «que las empresas necesitan encontrar nuevas formas de gestión de sus cadenas de suministro mediante estrategias de segmentación». Simchi-Livi analiza  las directrices para crear cadenas de suministros flexibles que permitan adaptarse a las condiciones cambiantes de los mercados.