En este nuevo post voy hablar de Sistemas de Incentivos vinculados a la Productividad. En los últimos tiempos se ha puesto de manifiesto la necesidad de facilitar la puesta en marcha de nuevos modelos retributivos que permitan referenciar los incrementos salariales al crecimiento de la productividad empresarial, en vez de mantener la referencia a la inflación, como se venía haciendo hasta ahora.

¿Qué es un sistema de incentivos ligado a la productividad?

Se trata de un sistema de retribución monetaria directa que no se incluye dentro de la retribución fija, y que varía de acuerdo con el rendimiento o productividad de las personas, equipo de trabajo o empresa.

¿Qué ventajas tiene?

  • Alinear los intereses de los accionistas, los empleados y la Dirección.
  • Evitar que la gente “trabaje para el jefe” y centrar la atención en las necesidades de los clientes y en lo que de verdad importa. “Dime como me mides y así me comportaré”.
  • Mejorar el sentimiento de equipo y el trabajo en equipo.
  • Facilitar la delegación de tareas: la gente tiene claro a lo que se tiene que dedicar.
  • Aumentar la motivación. El éxito pertenece a todos los empleados
  • Menor peso de «derechos adquiridos» y «consolidación»
  • Recompensar la calidad y el valor aportado: justicia.
  • Fidelizar a los buenos empleados.
  • Mejorar los resultados de la empresa. En definitiva

 

SER MÁS PRODUCTIVO Y COMPETITIVO

¿Qué premisas tengo que cumplir para ser más competitivo?

  • El tiempo de respuesta de mi proceso tiene que permitirme cumplir los plazos de entrega prometidos.
  • Tener capacidad para atender la demanda esperada.
  • Ser eficiente en mis operaciones para tener costes ajustados y precios competitivos.
  • Ser flexible en mis operaciones para atender los cambios solicitados por mis clientes.
  • La fiabilidad de mi proceso debe permitirme generar la calidad requerida.

 

 



Claves a tener en cuenta
Algunas claves a tener en cuenta a la hora de diseñar estos sistemas de retribución son las siguientes:

  • Involucración del personal.
  • Las empresas no son democráticas, pero deben ser participativas.
  • Son aplicables a cualquier sector, industria, servicios y áreas de apoyo, y tamaño de empresa
  • La perfección no existe: arranquemos con buen sistema y vayamos afinando.
  • Es necesario un buen análisis de los procesos y la elección adecuada de las variables e indicadores de productividad.
  • Reparto justo entre empresa y trabajador. Ganar-Ganar.
  • Simplicidad. 
  • Mejora continua de los sistemas retributivos. Las organizaciones cambian de estructura, los puestos cambian de contenido y responsabilidades.

 

Gerente de Consultoría en IMP Consultores